116 Quotes About The-infernal-devices

Me resultas curiosamente interesante, Will Herondale.

Miraba a Will como siempre lo hacían las chicas: un poco boquiabierta, como si no acabara de creer la visión que había materializado ante sí. A Tessa le hubiera gustado decirle que Will aún estaba mejor menos desarreglado, y que dejarse fascinar por su belleza era como dejarse fascinar por una hoja de acero afilado: peligroso e insensato. Pero ¿de que serviría? No tardaría en aprenderlo sola.

—¿Tienes algún otro americano que recomendarme? —¿Por qué iba a hacerlo si usted se burla de mis gustos? Creo que tiene que aceptar que en cuestiones de lectura estamos en extremos opuestos, como lo estamos en muchas otras cosas, y buscar sus recomendaciones en otra parte, señor Herondale.

Ello lo miró a los ojos. Eran azules como lagos; sintió como si se hundiera en ellos.

Para Tessa Gray, con motivo de recibir una copia de Vathek para leer:El califa Vathek y su sombría hordaAl infierno van, ¡no te aburrirán! Tu fé en mí recuperarás, A menos que este detalle te desagradeY mi humilde regalo desoigas. —Will.

—Tessa... —De repente, Magnus vio en su cabeza a la chica de ojos grises y rostro serio que había mirado a Will como si él fuera el sol que se alza en el horizonte.

Cuando Will quiere algo de verdad... —dijo Jem—, cuando lo siente, puede romperte el corazón.

Incluso en la oscuridad del carruaje, sus ojos eran de un azul luminoso. ¿Qué había dicho Jem sobre la belleza? «La belleza es cruel.»

Hay mecanismos que están tan... tan rotos que no se pueden reparar.