#Contemporáneo
Quotes about contemporáneo
In the ever-evolving tapestry of human experience, the concept of "contemporáneo" captures the essence of the present moment, reflecting the dynamic interplay between tradition and innovation. This term, often associated with the contemporary, embodies the spirit of the here and now, where the past informs the present, and the present shapes the future. It is a celebration of modernity, creativity, and the relentless pursuit of progress. People are drawn to quotes about "contemporáneo" because they resonate with the desire to understand and engage with the world as it is today. These quotes offer insights into the challenges and opportunities of our time, encouraging us to embrace change and think critically about our place in the world. They inspire us to be active participants in the unfolding narrative of our era, urging us to question, innovate, and redefine what it means to live in the present. In a world that is constantly shifting, quotes about "contemporáneo" provide a sense of connection and relevance, reminding us that we are part of a larger, ever-changing story.
Minerva soñaba con él, lo sentía con ella, lo sentía encima de ella, podía sentir su respiración, su cálido aliento en su cuello, la suavidad de sus labios, sentía las manos de él sobre su cuerpo y ella podía tocarlo, podía sentir su pecho, su espalda, podía sentir su desnudez sobre ella y comenzó a desearlo, en un acto de reflejo abrió las piernas y lo sintió en medio de ellas, deseaba que la penetrara, deseaba que le hiciera el amor.
Minerva sujetó su margarita y bebió un sorbo, intentó no ser tan obvia al momento de tragarla.—No voy a dar detalles de cómo la pareja hace el amor.—¿Porqué?—Porque no.—¿Y porque no?—Ya basta señor Brighton, no me haga dejar la velada a medias.—Y si tú vuelves a humillarme y salir corriendo creo que no la cuentas.
—Está bien, que sea en mi casa, sígame. —Con gusto. —Rick sonrió en señal de complacencia y se dirigió a su camioneta, esperó que ella saliera primero y ambos se dirigieron hacia su “cita inconclusa” En el fondo, él comenzaba a sentir satisfacción.
Minerva lo miró seriamente y lo estudió de pies a cabeza, realmente era un hombre hermosamente impecable y su cuerpo sentía sensaciones cuyas experiencias creyó haber olvidado pero a la vez, sentía un rechazo por él y prefirió hacer crecer una barrera.
—“Es el colmo, ya sólo me falta que yo también escriba un libro erótico, no sabía que era tan bueno imaginando y teniendo fantasías” —se dijo resignado entrando de nuevo al baño para darse una ducha fría y bajarse la excitación.
Minerva se sentó frente a él a la vez que se quitaba su chaqueta, para desgracia de Rick su blusa de botones dejaba ver más la forma de sus pechos y para colmo ese día ella usaba falda y a pesar de estar delgada, sus contorneadas piernas le parecían bonitas y más cuando ella las cruzó, los tacones negros altos la hacían ver estilizada y pensamientos lujuriosos comenzaron a apoderarse de él. No parecía la misma de la noche anterior, la miraba de manera diferente, le parecía mejor.
—¡Oh por Dios! —Exclamó estudiando a Rick de pies a cabeza, Minerva puso los ojos en blanco—. ¿De qué juguetería salió este muñeco?Rick levantó una ceja y tensó los labios, Carol era una mujer de contextura gruesa, cabello teñido oxigenado, de baja estatura y que para colmo ya pasaba los 50 y el comentario, no le hizo gracia viniendo de ella.“Otra vieja pervertida” —pensó—. “Que ni se le ocurra tener fantasías conmigo
—¡Oh por Dios! —Exclamó estudiando a Rick de pies a cabeza, Minerva puso los ojos en blanco—. ¿De qué juguetería salió este muñeco?Rick levantó una ceja y tensó los labios, Carol era una mujer de
—Eres joven… —Rick la miró y le habló casi en susurros, seductoramente la estaba tuteando—. Eres bonita, se nota la pasión en tu carácter, no finjas timidez, describe más erotismo, sé más explícita—. Rozó su brazo con su dedo por encima de la chaqueta, su mirada se desvió a sus pechos, deseaba rozarlos también—. ¿Necesitas inspiración? Si no tienes la suficiente yo puedo ayudarte con gusto.
Minerva no podía creer lo que se decía, pero era lo que sentía en su decepción, se levantó, miró la fotografía de Leonardo y le lanzó un beso.—Lo siento amor —le dijo antes de salir de su habitación—. Me quedaré como una simple redactora, al parecer no tengo temple de escritora, lamento decepcionarte.